miércoles, 9 de enero de 2013

Nostalgias


Cuando las tardes eran noches
y las mañanas se aprovechaban,
los crepúsculos solo un aviso
y noche era solo el cinco.


Los cuentos eran un mundo,
el nuestro, y los dibujos
nosotros mismos,
siempre sedientos de todo.


Siempre queriendo más
sin conformarnos con menos,
llorando sin avergonzarnos
y riendo cual tierna rutina de ensueño.

Pero que corto es el tiempo
de vivir soñando con todo,
de no saber que son sueños
porque entonces tan solo somos.

6 comentarios:

  1. Me alegra que las vacaciones no te hayan quitado fuerzas y ganas para seguir alimentando el blog con buena poesía...
    Te dejo mi correo electrónico por si te apetece ponerte en contacto para tu trabajo de la facultad:

    joseluismorante@msn.com

    Un abrazo y un saludo cordial.

    ResponderEliminar
  2. Bonita poesía, para releer y pensar, de esos poemas
    que te remueven los cimientos.
    Un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
  3. Gracias, José Luis,
    por estar siempre tan atento.
    Es una delicia encontrarse
    con alguien así.

    Un abrazo fuerte.

    ResponderEliminar
  4. Paco, siempre es tan
    gratificante leer tus comentarios.
    Si he conseguido remover
    un poquito los cimientos de alguien
    mis letras han cumplido.

    Muchísimas gracias.

    ResponderEliminar
  5. Soñar, razón de existir.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  6. Y hacer de los sueños una realidad.

    Besos.

    ResponderEliminar